La manzana es una de las frutas que más se consumen en todo el mundo, no solo porque están disponibles en cualquier época del año sino porque son versátiles y cuentan con un alto valor nutricional.
Sus principales beneficios para la salud se le atribuyen a su alto contenido de antioxidantes y fibras naturales, cuyos efectos en el cuerpo favorecen el proceso digestivo y la eliminación de las toxinas.
Lo más interesante es que se pueden convertir en buenas aliadas de la dieta, ya que son saciantes y ayudan a disminuir la ansiedad por la comida.
Como sabemos que algunos aún desconocen sus maravillosas propiedades, a continuación queremos compartirlas en detalle:
¿Te interesa conocerlas?
1. Mejora la salud cardiovascular
Una sola porción de manzana aporta cantidades significativas de fitoquímicos, unas sustancias naturales que ejercen un efecto antioxidante para proteger el organismo frente al daño causado por los radicales libres.
Esto permite mantener las células sanas y, a su vez, es clave para reducir el riesgo de desarrollar enfermedades cardíacas y cáncer.
Por otro lado, dado que aporta fibra soluble, disminuye los niveles de colesterol malo (LDL) en la sangre y evita la formación de placa en las arterias.
2. Tiene efecto diurético
Esta fruta se destaca por su alto contenido de potasio, un mineral esencial que le confiere un efecto diurético en el cuerpo.
La alta concentración de antioxidantes de la manzana ha sido relacionada con la disminución del riesgo de patologías cognitivas como el alzhéimer.
Las dificultades hepáticas son el resultado de hábitos alimenticios poco saludables y la exposición continua a las toxinas del ambiente.
Infecciones
Otros trastornos relacionados con la proliferación de virus, bacterias y hongos.
Todas las variedades de manzanas contienen antioxidantes, vitaminas y minerales que mejoran el aspecto de la piel.
Esto indica que, al añadirlas en la dieta, favorecen la eliminación de los líquidos retenidos y los problemas asociados a estos.
Están recomendadas para los pacientes con trastornos inflamatorios o hipertensión arterial, ya que mejoran los efectos del tratamiento.
3. Ayuda a conseguir unos dientes saludables
Consumir esta fruta de forma regular tiene interesantes beneficios sobre la salud bucal.
Dado que al masticarla se estimula la producción de saliva, su ingesta reduce el crecimiento bacteriano que provoca caries y otros tipos de infecciones.
Si bien una manzana no sustituye los hábitos de higiene dentales, es bastante útil en esos momentos donde no se tienen los utensilios de aseo a mano.
4. Reduce el riesgo de alzhéimer
Su capacidad para frenar el daño celular que provoca los radicales libres disminuye el envejecimiento cerebral prematuro.
5. Nos permite alcanzar un peso saludable
Las personas que incluyen esta fruta en su dieta pueden obtener importantes beneficios en lo que tiene que ver con el peso corporal.
Aunque no es un alimento “quemagrasas” o milagroso, los nutricionistas consideran que es un buen complemento para favorecer la pérdida de peso.
Su ingesta regular disminuye la ansiedad por la comida y ayuda a controlar el número de calorías que se ingieren a diario.
Además, alimenta las bacterias saludables que crecen en el colon y apoya el metabolismo de las grasas.
6. Optimiza la desintoxicación del hígado
Aunque es un órgano capaz de depurarse por sí mismo, la sobrecarga en tareas y la intoxicación dificulta que lleve a cabo sus funciones.
Por fortuna, al consumir un vaso de zumo de manzana natural se puede “impulsar” sus procesos de desintoxicación para que trabaje sin problema alguno.
7. Fortalece el sistema inmunitario
Las vitaminas y minerales esenciales que contiene la manzana son grandes aliados del sistema inmunitario del organismo.
Esto indica que, consumiendo una manzana al día, se reduce el riesgo de padecer:
Enfermedades respiratorias
8. Asegura una piel saludable y joven
Tanto su aplicación en mascarilla como su consumo directo contribuye a minimizar el daño oxidativo de las células, principal factor del envejecimiento prematuro.
Sus minerales mejoran la capacidad de oxigenación de la sangre, lo cual es clave para el proceso de limpieza y rejuvenecimiento.
9. Favorece una buena digestión
La manzana y su cáscara contienen un tipo de fibra llamada pectina que apoya los procesos de digestión.
Esta alimenta la mucosa intestinal y ayuda a controlar los desbalances en el pH estomacal para reducir el riesgo de desarrollar varios tipos de enfermedades.
Además, ejerce un papel protector frente a varios tipos de cánceres y problemas crónicos como el estreñimiento.
Como acabas de notar, son muchas las razones para empezar a consumir esta fruta con más regularidad.
Anímate a incorporarla en tu plan de alimentación y comprueba por ti misma todos sus beneficios.
Fuente: Mejor con Salud.
0 comentarios:
Publicar un comentario